En el encuentro que sostuvo ayer con los obispos de Benin en la capilla de la Nunciatura Apostólica, el Papa Benedicto XVI pidió a los prelados ser auténticos servidores del Evangelio, según el corazón de Dios, ya que eso es lo que esperan los fieles.
En su discurso a los obispos de las 10 diócesis del país en el 150 aniversario de la evangelización de Benin, el Santo Padre señaló que "esta celebración jubilar ha de ser para las comunidades y para cada uno de sus miembros ocasión de una profunda renovación espiritual. Y, como pastores del Pueblo de Dios, es vuestra responsabilidad discernir su perfil a la luz de la Palabra de Dios".
El Papa dijo luego que "el Año de la fe, que he querido promulgar para el quincuagésimo aniversario de la apertura del Concilio Vaticano II, será sin duda una buena oportunidad para fomentar en los fieles el redescubrimiento y profundización de su fe en la persona del Salvador de los hombres".