En su discurso esta mañana a los participantes de la asamblea plenaria de la Comisión Teológica Internacional, el Papa Francisco señaló que "¡Dios no es una amenaza para el ser humano!", sino que es una Buena Nueva para todos los hombres.
El Santo Padre señaló que "vuestras reflexiones atestiguan que la Revelación de Dios constituye realmente una Buena Nueva para todos los hombres. ¡Dios no es una amenaza para el ser humano! La fe en el Dios único y tres veces santo no es y nunca puede ser generadora de violencia e intolerancia".
"Al contrario, su carácter, altamente racional le confiere una dimensión universal, capaz de unir a los hombres de buena voluntad. Por otra parte, la Revelación definitiva de Dios en Jesucristo ha hecho imposible cualquier recurso a la violencia 'en el nombre de Dios'. Precisamente por su rechazo de la violencia, por haber derrotado al mal con el bien, con su sangre en la cruz, Jesús ha reconciliado a los hombres con Dios y entre ellos".