Una granada de guerra fue encontrada entre las donaciones enviadas a la Asociación de las Bienaventuranzas, un albergue que ayuda a ancianos, niños huérfanos y personas sin hogar en Perú.
El P. Omar Sánchez Portillo, secretario general de Cáritas Lurín y director de esta organización, indicó que el paquete con el explosivo fue dejado durante el último fin de semana en el centro de acopio del distrito de Miraflores en Lima.
Sin embargo, pasaron dos días para que la granada fuera descubierta por un voluntario en el local central de la Asociación ubicado en Tablada de Lurín.