29 de septiembre de 2020 / 07:12 PM
El sacerdote claretiano, P. Juventino Rodríguez, afirmó que la construcción de la nueva iglesia de San Benito del Crucero representa un "pequeño milagro" que abre una etapa para la vivencia de la fe católica en la comunidad cubana, tras años de no contar con un templo debido a la persecución religiosa a causa de la Revolución.
Desde que la Revolución de Fidel Castro tomó el poder en 1959, la Iglesia Católica en Cuba ha sufrido restricciones a su libertad con la confiscación de propiedades, eliminación de colegios católicos, expulsión de sacerdotes y religiosas, entre otros.
Ante la expropiación de iglesias, los fieles en Cuba ofrecían con riesgo sus casas para celebrar la Eucaristía y continuar la evangelización de forma clandestina. En los últimos años, el Gobierno devolvió algunas iglesias confiscadas, pero otras siguen en su poder y son utilizadas como depósitos, colegios, tiendas de víveres e incluso para asuntos del régimen.