La Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) condenó el 20 de abril al Estado de Chile argumentando que discriminó por su "orientación sexual" a Sandra Pavez, a quien la Iglesia no renovó la acreditación para enseñar religión por mantener una relación de pareja del mismo sexo, y ordenó que sea reincorporada "al cargo que ocupaba como profesora en una institución pública".
Expertos de la organización de defensa legal cristiana ADF International lamentaron la decisión de la Corte. Indicaron que el fallo desprotege los derechos de los padres a escoger la educación de sus hijos y "socava la autonomía de las Iglesias".
Sandra Pavez Pavez impartía clases de religión católica en el liceo Cardenal Antonio Samoré de la comuna de San Bernardo, Santiago de Chile, desde 1991.