26 de octubre de 2012 / 03:12 AM
El Arzobispo de Mérida (Venezuela), Mons. Baltazar Porras, afirmó que "a cincuenta años de distancia, el (Concilio) Vaticano II es tarea viva" y por ello los fieles deben participar activamente en el Año de la Fe convocado por el Papa Benedicto XVI.
"Benedicto XVI convoca a un año de la fe, que no es otra cosa, sino retomar la centralidad del Concilio desde el ser creyente para convertirlo en esperanza de la humanidad, dando razón de ello a través de la caridad, el amor desinteresado a todos, empezando por los más pobres", expresó en un artículo enviado a ACI Prensa.
El Prelado recordó que el Concilio Vaticano II despertó en 1962 "un inusitado interés dentro y fuera de la Iglesia católica. Se trataba, nada más y nada menos, que abrir las puertas al mundo, revisar muchos aspectos de su vida interna y de su relación con la sociedad mundial en cambio profundo por las heridas de la segunda guerra mundial y los avances de la ciencia".