Las tumbas del Cementerio Teutónico, dentro de los muros del Vaticano, donde existía la posibilidad de que se encontraran los restos de la niña Emanuela Orlandi, hija de un empleado vaticano desaparecida el 22 de junio de 1983, estaban vacías.
Según confirmó el director interino de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Alessandro Gisotti, técnicos y personal de la Fábrica de San Pedro abrieron este jueves 11 de junio a las 08:15 de la mañana, hora de Roma, las tumbas de dos princesas alemanas para verificar si en su interior se encontraban los restos de la niña desaparecida cuando tenía 15 años.
Tras abrir las sepulturas, siguiendo el decreto del Promotor de Justicia del Tribunal del Estado de la Ciudad del Vaticano, Gian Piero Milano, los técnicos se encontraron con una sorpresa que da lugar a nuevos interrogantes: ambas sepulturas estaban vacías.