22 de septiembre de 2004 / 09:46 AM
El Arzobispo de Madrid y presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Cardenal Antonio María Rouco Varela, pidió no hacer experimentaciones políticas o jurídicas con el auténtico matrimonio y la familia al tiempo que subrayó el “deber grave y urgente” de los católicos y de toda la sociedad en su promoción y cuidado.
En una carta pastoral, el Purpurado sostuvo que “si ya no es aconsejable la permanente experimentación política y jurídica con ese instrumento pedagógico tan importante para la educación del hombre en la fase inicial y fundante de su vida que es ‘la escuela’; mucho menos se debe experimentar con el matrimonio y la familia que constituyen el marco primero y más íntimo” de la persona humana.
Tras criticar los intentos de disponer totalmente de la existencia del ser humano alejándose, aunque sea disimuladamente, de las “grandes y fundamentales exigencias morales”, el Purpurado enfatizó que “¡la verdad de la persona humana, de sus derechos y deberes fundamentales, y la de las instituciones básicas en las que nace, crece y se desarrolla, está, entrañada en el mismo ser del hombre, diseñado y creado por Dios!”.