En su homilía dominical, el Arzobispo de Lima y Primado del Perú, Cardenal Juan Luis Cipriani Thorne, aseguró que “Dios no negocia su palabra, la ofrece como un don” al referirse a la imposibilidad de dialogar en “confrontación con la palabra de Dios”.
El Purpurado explicó que la humanidad está dividida en dos: “Aquellos que aceptan la realidad del pecado y aquellos que no la aceptan. No es problema de tolerancia, ni democracia ni pluralismos. Es la fe que me dice: acepto la revelación, la palabra de Dios, la enseñanza de la Iglesia Católica”.
“Al otro lado –continuó– encontraremos a quienes quieren convalidar al pecado con una forma de pluralidad, de tolerancia, con una expresión del mundo moderno. ¿Por qué? Porque les falta aceptar con humildad que cometemos pecados y esto no es bueno. Ahí está el punto de corte”.