Los Caballeros de Colón, la organización laical más grande del mundo, anunciaron una campaña para recolectar y donar 2 millones de dólares para salvar Karamdes, un pueblo de mayoría cristiana en Irak.
El Estado Islámico, al proclamar su califato en 2014, invadió las planicies de Nínive, en Irak, una región en la que se establecían diversos pueblos de mayoría cristiana. Los cristianos en la región, considerados como "infieles" por los extremistas musulmanes, fueron expulsados, secuestrados o asesinados, y sus propiedades fueron saqueadas.
Los templos cristianos fueron usados en muchos casos como sitio de entrenamiento de los terroristas, disparando a las imágenes, o incluso como cárceles para sus esclavas sexuales.