El Papa Benedicto XVI y el Presidente de la República Socialista Democrática de Sri Lanka, Mahinda Rajapaksa, coincidieron en resaltar la necesidad de respetar los derechos humanos y retomar el camino del diálogo como “único camino para poner fin a la violencia que ensangrienta la isla”.
"Durante los coloquios, a la luz de la situación actual en Sri Lanka, se ha hecho hincapié en la necesidad de respetar los derechos humanos y de retomar la vía del diálogo y de las negociaciones como único camino para poner fin a la violencia que ensangrienta la isla”, informa la Oficina de Prensa de la Santa Sede a través de un comunicado.
“La Iglesia Católica, que ofrece una importante contribución a la vida del país, intensificará el delicado compromiso de formar las conciencias, con la única ambición de favorecer el bien común, la reconciliación y la paz", concluye el texto.