Al finalizar el concierto en su honor organizado hoy por el Presidente de Italia, Giorgio Napolitano, en el 5° aniversario de su pontificado, el Papa Benedicto XVI destacó el gran valor pedagógico de la música, en medio de un mundo hostil a una adecuada educación, y explicó que ésta es "capaz de abrir las mentes y los corazones a la dimensión del espíritu y conduce a las personas a elevar la mirada hacia lo Alto, a abrirse al Bien y a lo Bello absolutos, que tienen su fuente última en Dios".
Tras la ejecución de diversas sinfonías de Sammartini, Mozart y Beethoven, por parte de la Orquesta Juvenil Italiana, el Santo Padre se refirió a los aspectos positivos de la música para la educación. En particular, dijo, se reconoce el valor formativo de la música en sus implicaciones de naturaleza expresiva, creativa, interpersonal, social y cultural, que asumen una gran relevancia, también, frente a una realidad cotidiana en la que no es fácil educar.
"En el actual contexto social, de hecho, cada obra de educación pareciera ser cada vez más ardua y problemática: con frecuencia entre los padres y los educadores se habla de las dificultades que se encuentran para transmitir a las nuevas generaciones los valores fundamentales de la existencia y de un recto comportamiento", dijo el Papa, según señala la nota de Radio Vaticano.