24 de agosto de 2016 / 06:17 PM
El Papa Emérito Benedicto XVI explicó en una entrevista concedida al diario italiano La Repubblica que el detonante para presentar su renuncia al pontificado en febrero de 2013 fue la convicción de que no podría viajar a Brasil para asistir a la Jornada Mundial de la Juventud en Río de Janeiro en julio de ese año.
En la entrevista, el Sumo Pontífice Emérito explica que "tenía dos convicciones bien precisas: después de la experiencia del viaje a México y Cuba, ya no me sentía en la capacidad de hacer un viaje tan fatigoso".
"Además con la estructura que San Juan Pablo II dio a estas jornadas, la presencia física de un Papa era indispensable. No se podía pensar en una conexión televisiva o en otras formas respaldadas por la tecnología", dijo Benedicto.