El Papa Benedicto XVI dispuso el envío de un donativo de 100,00 euros (alrededor de 125,175 dólares) para el auxilio de los damnificados por el terremoto ocurrido al norte de Italia, que causó la muerte de siete personas, alrededor de cincuenta heridos y más de cinco mil evacuados.

El dinero será repartido entre las diócesis afectadas de Carpi, Mantua, Módena y Ferrara-Comacchio-Nonantola, y servirá para apoyar las actividades de asistencia emprendidas por la Iglesia Católica para auxilio de las víctimas.

En un comunicado emitido hoy, la Santa Sede indicó que la donación, que será entregada a través del Pontificio Consejo Cor Unum, “está destinada a ser una expresión concreta de los sentimientos de cercanía espiritual y paternal solicitud del Sumo Pontífice a las personas afectadas por el terremoto".