Ante miles de fieles reunidos en la Plaza de San Pedro con ocasión de la tradicional audiencia de los miércoles, el Papa Benedicto XVI subrayó la necesidad de una relación personal con Jesús para la evangelización que no consiste en anunciar una idea sino en dar testimonio de una persona.
"La aventura de los Apóstoles comienza como un encuentro de personas que se abren recíprocamente. Comienza para los discípulos un conocimiento directo del Maestro. Ellos no tendrán que ser anunciadores de una idea, sino testimonios de una persona”, dijo el Santo Padre durante la catequesis sobre “Los Apóstoles, testimonios y enviados de Cristo”.
“Antes de ser enviados a evangelizar, tendrán que estar con Jesús, estableciendo con Él una relación personal. Sobre esta base, la evangelización no será otra cosa que un anuncio de aquello que se ha experimentado y una invitación a entrar en el misterio de la comunión con Cristo”, agregó el Pontífice al reflexionar sobre el llamado a los apóstoles que transmiten los evangelistas.