El director de Comunicación de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) Madrid 2011, Rafael Rubio, señaló que los ataque sufridos en agosto del año pasado a manos del grupo Anonymous fueron una demostración evidente del impacto mundial que tuvo y tiene el evento católico.
En declaraciones a ACI Prensa el 28 de febrero, Rubio subrayó que el ataque fue una pérdida de tiempo de quienes lo orquestaron. "Nunca entendimos muy bien qué perseguían a tacando a la JMJ, creo que lo único que buscaban era notoriedad", señaló.
"Me parece que la causa fundamental fue llamar la atención, atacando el evento más notorio de los que se estaban celebrando en el mundo en ese momento".