22 de febrero de 2012 / 03:20 AM
El Arzobispo católico maronita de Antioquía, con sede en Bkerke (Líbano), Mons. Paul El-Sayeh, hizo un llamado para que se las partes en conflicto en Siria depongan las armas y negocien, pues dijo temer una guerra civil a gran escala en el país que se pueda extender a otros estados.
El Prelado describió la situación actual como "desesperada", por lo que pidió a la comunidad internacional para que se pueda sostener una mesa de diálogo entre las fuerzas rebeldes y el régimen sirio de Bashar al-Assad.
En declaraciones recogidas por la organización católica internacional Ayuda a la Iglesia Necesitada (AIN), Mons. El-Sayeh señaló que "todos están sufriendo en Siria porque hay violencia llegando de todos lados. Es una situación desesperada y quisiera que todos se sentaran y negociaran, porque los problemas no se pueden resolver con violencia".