El Arzobispo de Mosul, Mons. George Casmoussa, denunció la crítica situación de los cristianos en Irak, quienes en estos últimos días han sido atacados por extremistas musulmanes que asesinaron el lunes a un anciano propietario de un pequeño negocio y secuestraron a una joven estudiante el 31 de diciembre.
El Prelado indicó a Radio Vaticano que "la situación de los cristianos en Mosul es no muy buena. Muchos episodios, malos, se han visto en el mes de diciembre: muchas iglesias han sido bombardeadas o atacadas y algunos cristianos han sido asesinados. Cinco o seis personas han perdido la vida en el mes".
En Navidad y Año Nuevo, dijo Mons. Casmoussa, "nuestras iglesias estaban vacías porque muchas de las calles para acceder a ellas estaban cerradas. No es una situación normal, no hay seguridad y sentimos que las autoridades centrales o locales no logran tener pleno control, especialmente ahora, antes de las elecciones".