El Arzobispo de Tokio, Mons. Isao Kikuchi, espera que la visita del Papa Francisco a Japón sea más que un alto al uso de armas atómicas, y represente un llamado a la vida y la esperanza en un país donde la natalidad es cada vez más baja y el suicidio es común entre los jóvenes.
Luego de estar en Tailandia del 20 al 23 de noviembre, el Papa Francisco visitará Japón hasta el 26 del mismo mes y pasará por las ciudades de Hiroshima y Nagasaki, donde visitará el Monumento de los Mártires en Nishizaka Hill y el Memorial de la Paz. Así mismo, tendrá una reunión con el emperador Naruhito y el primer ministro, Shinzo Abe, en Tokio, y celebrará la Santa Misa en Tokyo Dome.
Francisco llegará al país oriental,bajo el tema "Protege cada vida".