La Corte Constitucional de Colombia anuló la sanción impuesta contra el médico Germán Arango Rojas, a quien le suspendieron la licencia por negarse a practicar un aborto, y reconoció su derecho a la objeción de conciencia.
Los magistrados anularon en la Sala Plena la decisión del Tribunal de Ética Médica que en el año 2008 suspendió a Arango Rohas y le ordenó indemnizar a la mujer que no fue sometida al aborto.
Aunque falló a favor del médico –que inició el proceso en respuesta a la sanción recibida–, la Corte mantuvo la decisión de sancionar a la entidad prestadora de salud Cosmitel por no haber facilitado el aborto solicitado por los padres de una menor discapacitada.