La organización internacional católica Ayuda a la Iglesia Necesitada (AIN) exigió al gobierno de Pakistán la abolición de la llamada "Ley contra Blasfemias" que, explican, "está definitivamente ligada" a los recientes ataques sufridos por cristianos que dejaron el saldo de ocho personas quemadas vivas por parte de extremistas musulmanes en Gora, provincia de Punjab.
Los asesinatos ocurrieron tras el rumor propalado de que algunos cristianos habían sacado hojas del Corán y las habían utilizado como "confeti"; rumor que fue desmentido por la Ministra de Justicia de la provincia de Punja, Rana Sanaullah, quien explicó que eso definitivamente no había sucedido.
En una declaración de AIN, distintas figuras católicas advierten que esta norma no solo promueve la persecución de los cristianos, sino que pone en peligro a otras minorías así como a todos los pakistaníes; y llaman a "las personas de buena voluntad a trabajar en la abolición de esta ley".