El Cardenal Baltazar Porras Cardozo, Arzobispo de Mérida y recientemente nombrado Administrador Apostólico de Caracas, afirmó que llega a servir en la capital de Venezuela para acrecentar la alegría de evangelizar, "incluso cuando hay que sembrar entre lágrimas".
En su primer saludo a los fieles de Caracas este 12 de julio, el nuevo Administrador Apostólico destacó la amistad que lo une con el Cardenal Jorge Urosa Savino, "compañero y hermano desde el seminario", y con quien compartió responsabilidades como superiores en los seminarios caraqueños y dentro del Episcopado. "El Señor y la Virgen lo sigan bendiciendo con creces", expresó.
"No traigo ningún plan preconcebido, pues lo primero que quiero hacer es escuchar y atender los clamores, necesidades y expectativas de un pueblo sumido dramáticamente en la honda crisis que padece el país", escribió en su saludo publicado este jueves por la Arquidiócesis de Caracas.