Harrison Butker y el Cardenal Raymond Burke (2023). Crédito: Cortesía de Austin Quick
7 de marzo de 2023 / 04:05 PM
Harrison Butker, estrella de fútbol americano de los Kansas City Chiefs y reciente ganador del Super Bowl 2023, es un campeón en el campo y en la vida espiritual, ya que asegura que no busca nada menos que convertirse en un santo.
"Si queremos ser santos, tenemos que morir a nosotros mismos", declaró Butker a CNA –agencia de EWTN News– en una entrevista el 1 de marzo.
Durante la sorprendente victoria de su equipo contra los Philadelphia Eagles el 12 de febrero, una imagen de televisión mostró el escapulario de la Virgen del Carmen que Butker llevaba en su cuello.
"Creo que fue nuestra Santísima Madre pidiendo que se le pusiera el foco de atención y recordándome que toda la gloria es para Dios y para Ella", señaló.
El escapulario, que está compuesto por dos piezas de lana marrón y se lleva colgado sobre el pecho y la espalda, es un sacramental de tradición carmelita que cualquier persona puede llevar como signo de su consagración a la Virgen María.
No fue hasta la temporada 2022-2023 que Butker comenzó a usar su escapulario las 24 horas del día, los 7 días de la semana, luego de darse cuenta de que necesitaba dar un salto de fe y confiarse a la Madre de Dios en todo momento.
El sacramental de Butker ha provocado comentarios sobre su fe católica dentro del vestuario de los Chiefs. Algunos jugadores preguntaban: "¿Qué es ese collar marrón que llevas puesto?".
Butker aseguró haber tenido "algunas conversaciones realmente buenas" en el vestuario, y su escapulario le dio la oportunidad de dar testimonio del poder de la devoción a María y de la fe católica.
Consideró que es importante que los católicos sean abiertos sobre su fe en sus trabajos, incluso si los hace parecer "raros" o "diferentes".
"No podemos avergonzarnos de nuestra fe, porque, si somos católicos, conocemos todos los frutos que Nuestro Señor nos ha dado. Y si atesoramos esos frutos, y no los abrimos a los que están a nuestro alrededor, especialmente en el lugar de trabajo, entonces creo que le estamos haciendo un flaco favor a Nuestro Señor", sostuvo.
La estrella de la Liga Nacional de Fútbol Americano siempre se tomó su fe muy en serio, pero muchos pueden llegar a sorprenderse al saber que la última temporada fue su mayor prueba de fe hasta hoy.
Esta temporada "perdí muchos tiros, así que fue la primera vez que sentí que mucha gente tenía muchas cosas negativas que decir sobre mí", comentó.
Además, en el primer juego de la temporada, en el mismo campo resbaladizo del State Farm Stadium en Glendale, Arizona, donde eventualmente patearía el gol de campo con el que su equipo ganó el Super Bowl, Butker se cayó en una patada inicial y sufrió un devastador esguince de tobillo, dejándolo fuera de juego durante semanas.
Al respecto, aseguró que "la voluntad de Dios es mejor que la mía".
Ciertamente, Dios tenía un plan para Butker, y ese plan involucró las oraciones de un miembro del Colegio de Cardenales que vio el partido en el Arrowhead Stadium en Kansas City, Missouri.
Sin saber si su tobillo torcido se curaría a tiempo para jugar, Butker invitó al Cardenal Raymond Burke, Arzobispo Emérito de la Arquidiócesis de St. Louis (Estados Unidos), amigo suyo, a un partido en casa contra los Buffalo Bills.
Butker regresó al campo esa misma semana, atribuyendo la mejoría a la providencia de Dios. Luego rompió un récord personal y de los Chiefs al patear un gol de campo de 62 yardas (57 metros aproximadamente), algo que atribuye en parte a las oraciones del Purpurado.
El Cardenal Burke felicitó a Butker después del juego, y el deportista explicó por qué quería que el Purpurado estuviera allí esa noche.
"La santidad de este hombre y la cantidad de virtud que tiene, y la cantidad de conocimiento de la vida espiritual es increíble. Y quiero aprovechar todas las oportunidades que tenga para estar cerca de él, porque quiero gente a mi alrededor que me empuje a ser un santo para ser mejor", expresó.
Butker le dijo a CNA que está siendo "intencional" con las personas con las que pasa el tiempo.
"Y al final del día, tenemos que preguntarnos: ¿Esta persona nos está empujando a ser santos y a estar más cerca de Dios?". Si la respuesta es "no", dijo Butker, entonces no es necesario cortar la amistad, pero es importante encontrar otros amigos que "nos empujen a crecer".
"El hierro afila el hierro", agregó.
El porcentaje de tiros de campo de Butker en la temporada 2022-2023 cayó al 75%, mucho más bajo de lo que logra habitualmente cada temporada como uno de los mejores pateadores de la liga. De hecho, indicó que esta temporada le ha presentado "el mayor sufrimiento" y "la mayor adversidad" que ha tenido que afrontar.
No obstante, señaló que está agradecido, porque eso lo empujó a confiar en Dios y a crecer en humildad.
"Cuando estás sufriendo, ¿cómo lo superas? Solo puedes superarlo confiando en ese fundamento, que es Jesús en el Santísimo Sacramento", dijo.
"Este fue el mayor sufrimiento, la mayor adversidad que he enfrentado, pero también estoy más agradecido. Y estoy emocionado por lo que Dios tiene reservado para mi vida", agregó.
Traducido y adaptado por ACI Prensa. Publicado originalmente en CNA.
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Harrison Butker, el pateador de fútbol americano que anotó el gol de campo que le dio el triunfo a los Kansas City Chiefs, en el Super Bowl del domingo, es un católico devoto, defensor de la vida y que aprecia la Misa tradicional.
