Esposas, madres e hijas de presos políticos cubanos han enviado una carta a los participantes en la III Cumbre de América Latina y el Caribe-Unión Europea solicitando que intervengan ante Fidel Castro para lograr la liberación de 75 presos de conciencia.
La misiva enviada desde la capital cubana coincidió con un mensaje enviado por Castro “al pueblo mexicano” en el que explica que su no asistencia a la cumbre se debe a que Cuba fue traicionada por “varios países latinoamericanos” y miembros de la Unión Europea “confabulados con la política de Estados Unidos”.
Los familiares de los disidentes demandan en su carta “que el gobierno de Cuba libere a estos prisioneros de conciencia, y mientras tanto permita el acceso a las cárceles y hospitales de prisioneros a la Cruz Roja Internacional, la Comisión de Derechos Humanos de la OEA, Amnistía Internacional, Human Rights Watch y otras organizaciones no gubernamentales, así como médicos especialistas y periodistas extranjeros”.