Al recibir a los obispos norteamericanos de las regiones de Indianápolis, Chicago y Milwaukee el Papa Juan Pablo II hizo un llamado a dar un testimonio vivo de la fe cristiana para responder al agnosticismo desde el Evangelio.
El Papa afirmó en su discurso que “cada cristiano, en la realización de su misión profética, tiene una responsabilidad personal en la verdad divina revelada en el Verbo Encarnado”. “Esta ‘responsabilidad por la verdad’ exige por parte de la Iglesia un testimonio sincero y creíble del depósito de la fe”.
“Para proclamar eficazmente el Evangelio en la sociedad occidental contemporánea es necesario afrontar directamente el difundido espíritu de agnosticismo y relativismo que ha puesto en entredicho la capacidad de la razón de conocer la verdad que solo satisface la búsqueda inquieta de sentido del corazón humano”, señaló el Pontífice.