3 de septiembre de 2022 / 09:36 AM
Edoardo Luciani, sobrino de Juan Pablo I que será declarado beato este domingo 4 de septiembre, desmintió la leyenda que asegura que al Papa lo envenenaron en el Vaticano, y precisó que su tío murió de forma natural.
En declaraciones a La Brújula Cotidiana, Luciani comentó que su tío "debía morir joven y por la gracia de Dios sobrevivió porque su vida tenía un propósito en el plan de Dios, murió de la misma manera, Dios lo llamó".
Cuando murió el 28 de septiembre de 1978, solo 33 días después de su elección, "nos dijeron lo que había sucedido. Algunos dicen que tuvo un infarto, pero nunca tuvo problemas cardíacos, su corazón era fuerte".