En un gesto histórico, la Arquidiócesis de Boston decidió vender a una universidad jesuita la residencia en la que vivieron los arzobispos locales desde hace 75 años y sus terrenos aledaños, para sufragar el coste de varias demandas por inconducta sexual de sacerdotes.
Según informó la prensa local, la residencia y los terrenos ocupan un área de 17 hectáreas y serán vendidos por más de 100 millones de dólares a la universidad Boston College.
La universidad jesuita acordó también pagar otros ocho millones de dólares en dos años para comprar 1,3 hectáreas del terreno aledaño a la mansión, y conservará la opción de adquirir otras siete hectáreas cercanas en los próximos diez años si la arquidiócesis decide venderlas.