Al recibir este martes a los participantes en la asamblea plenaria anual de la Pontificia Comisión Bíblica que preside el Cardenal Joseph Ratzinger, el Papa Juan Pablo II señaló que las Sagradas Escrituras son una fuente de luz para la conducta humana.
“Os habéis reunido de nuevo –dijo el Santo Padre- para profundizar en un argumento muy importante: la relación entre Biblia y moral”. “Se trata de un tema que afecta no solo a los creyentes, sino de alguna manera a todas las personas de buena voluntad”, agregó el Papa.
“Efectivamente –continuó-, a través de la Biblia, Dios habla y se revela a sí mismo e indica la base sólida y la orientación segura para el comportamiento humano.”