“Filipinas es realmente un ‘faro’ para la evangelización del continente asiático”, dijo el Papa Juan Pablo II al recibir el lunes por la mañana a la nueva embajadora de la República de Filipinas, Leonida L. Vera.
El Papa recordó que Filipinas “siempre ha mantenido una fe cristiana fuerte” a pesar de los obstáculos y que la experiencia de la Jornada Mundial de la Juventud celebrada en Manila en 1995 “fue una muestra del deseo nacional de ejercer esta responsabilidad” de preservar los valores patrimoniales y extender los ideales de la cultura cristiana en el mundo.