5 de junio de 2021 / 09:34 PM
El sacerdote católico Joseph Sethang ha hecho un llamado a la comunidad internacional para que brinde ayuda y acoja a los desplazados por la violencia militar en el estado Chin, en el oeste de Myanmar.
"Es urgente detener los combates. Muchas personas inocentes sufren y están desesperadas. Se necesita ayuda internacional porque aquí hay una emergencia humanitaria. Pedimos a las agencias de la ONU y a las ONG que abran oficialmente los campos de refugiados para poder ofrecer ayuda humanitaria a los desplazados de Mindat y sus alrededores", dijo el sacerdote a la agencia vaticana Fides.
"Pedimos a las fuerzas armadas birmanas y a las Fuerzas Populares de Defensa de Mindat que detengan los combates y dejen de dañar a civiles inocentes, mujeres, niños y ancianos que ya están sufriendo demasiado", añadió.