27 de enero de 2021 / 11:31 AM
El 25 de enero, Regina Lynch, responsable de proyectos de la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN) denunció el asesinato de cientos de cristianos, entre sacerdotes y fieles, víctimas del aumento de la violencia durante el actual conflicto político que atraviesa Tigray, en el país africano de Eritrea.
La región de Tigray, cuya capital es Mekele, es la más septentrional de Etiopía y hace frontera con Eritrea y Sudán. El 95% de la población es cristiana, de la Iglesia Ortodoxa Copta etíope, y pertenece a la etnia tigrey, informó ACN.
Fuentes de la fundación "aseguran que la violencia no está motivada por la religión" sino por el conflicto político en la región, que estalló luego de que se pospusieran las elecciones parlamentarias del 29 de agosto de 2020, debido a la pandemia del COVID-19.