"Nosotros como Iglesia también hemos perdido nuestro sabor. Hemos perdido personas, hemos perdido prestigio y protagonismo en la sociedad civil. Entonces, al igual que Magallanes, debemos perder el miedo y arrojarnos al mar. Y eso es ser testigos de Jesús en este mundo, en esta cultura nueva, con lenguajes, con códigos distintos, pero que necesita del Evangelio de Cristo", finalizó.
El aniversario de la primera Misa en territorio argentino tendrá como protagonistas a los jóvenes y migrantes "porque son los preferidos en el corazón de Jesús, y queremos que se vea la diversidad de nuestra sociedad", manifestó Mons. García.
Ese espíritu festivo será acompañado por números artísticos y musicales que mostrarán "la diversidad de las diversas colectividades de la Patagonia" como por ejemplo, la comunidad de Pico Truncado de Santa Cruz, con una representación histórico cultural; el grupo Filocalia, el ballet de San Julián y el grupo Toco para Dios, entre otros.
El martes 31 de marzo desde las 2:00 p.m. habrá charlas, actividades recreativas y una carpa misionera con distintas propuestas.