Unos dos mil jóvenes entre los 16 y 30 años escribieron una carta abierta a los legisladores de Portugal para pedirles que no legalicen la eutanasia, una práctica que convertiría a los médicos en los "jueces de la vida y de la muerte".
Así lo indicaron los jóvenes, vinculados a la Compañía de Jesús, en la carta abierta "Prevenir lo que no se puede remediar", publicada por la agencia Ecclesia del Episcopado portugués, en la víspera de la votación que se realizará este jueves 20 de febrero en el Parlamento.
En la carta los jóvenes señalan que la eutanasia convierte a la muerte asistida "no en un acto médico sino también en un acto jurídico" y transforma los médicos en "jueces de la vida y de la muerte".