Mons. Michael Mulvey, Obispo de la diócesis católica de Corpus Christi (Estados Unidos) donó parte de su médula ósea para salvar la vida de una madre de familia.
Antes de convertirse en obispo y cuando servía en Austin, el Prelado se unió en 2004 a la organización Be the Match Registry, el registro para trasplantes de médula ósea más grande del mundo, que es administrado por el Programa Nacional de Donantes de Médula.
Es así que el Prelado de 70 años fue contactado recientemente por la organización y debió viajar a San Antonio para hacer una donación de células estaminales periféricas. Con esta acción, Mons. Mulvey ayudó a salvar la vida de una madre de familia diagnosticada con un tipo de cáncer a la sangre.