6 de marzo de 2019 / 11:07 AM
Como ya es tradición, este Miércoles de Ceniza el Papa Francisco se trasladó del Vaticano a la colina del Aventino de Roma para celebrar la primera estación de la cuaresma en la iglesia de San Anselmo y posteriormente la Misa en la basílica de Santa Sabina.
Al comienzo, el Santo Padre deseó "la paz esté con ustedes" después de que los monjes benedictinos entonaran el tradicional himno 'Audi, benigne conditor' que recuerda la importancia de la penitencia.
Luego, el Papa rezó esta oración: "Acompaña con tu benevolencia, Padre misericordioso, los primeros pasos de nuestro camino penitencial, para que a la observancia exterior corresponda una profunda renovación del espíritu".