17 de febrero de 2018 / 02:35 PM
Durante su infancia en Corea del Norte, Mi Jin Kang nunca creyó en la existencia de Dios, hasta que una persona comenzó a despertar su curiosidad.
"De la educación escolar, aprendí que la religión es una droga. Sin embargo, escuché la historia de Dios de una niña que conocí en Corea del Norte antes de mi escape. Este fue el primer paso para creer", dijo Mi Jin a CNA –agencia en inglés del Grupo ACI–.
"Antes de escapar de Corea del Norte, la historia de Dios era una curiosidad ", dijo Mi Jin, que decidió escapar de Corea del Norte en 2009, a la edad de 40 años.