Pese a que oficialmente en Myanmar existe libertad de culto, la evangelización en este país mayoritariamente budista pasa por una serie de dificultades, tal como narró desde el anonimato un misionero español, que debe usar una visa de negocios porque el religioso es "solo para aquellas personas que vienen a tener una experiencia en un templo budista".
En una entrevista publicada por las Obras Misionales Pontificias, el misionero español explicó que se esperan unas 300 mil personas en los encuentros con el Papa, de los 700 mil católicos que hay en el país.
"Como la gente es pobre, y es muy costoso viajar a la capital, la Iglesia está haciendo muchísimo esfuerzo para que los fieles puedan asistir a los actos", explica y precisa que el Cardenal Charles Bo escribió a todas las parroquias, diócesis, congregaciones y obispos, pidiéndoles que faciliten a los fieles que vayan a los actos.