1 de abril de 2015 / 03:13 AM
Entre el medio millón de personas reunidas en la Marcha por la Vida, se encontraban también niños, jóvenes y adultos que con dificultad pero demostrando la alegría de vivir, llegaron al final de la Marcha para decir: "Mi madre dijo sí, por eso estoy aquí"
Tener alguna discapacidad física, síndrome de Down, o ser una persona de habilidades especiales, no fue ningún límite para aquellos que fueron a celebrar la vida junto a sus familiares. Así como Liliana, quien fue a la Marcha en compañía de su hermano Jesús, un joven con Síndrome de Down.
"Él es Jesús, es mi hermano y ha venido a la marcha porque él es una muestra de que hay que decirle sí a la Vida, porque es una persona con muchas capacidades especiales y porque mi mamá dijo sí a la vida él está con nosotros" nos comentó.