En julio de 1993, una adolescente de 15 años fue llevada para que aborte en un centro de salud para mujeres en Wichita, Kansas, Estados Unidos. Estaba embarazada de una niña que ya estaba a término y en posición para el parto.
@StunMac We do & maybe #abortion clinics should stop injuring the babies first. http://t.co/lX8wkWgndb pic.twitter.com/ZOKwknguAd
- Christina Dunigan (@GrannyGrump42) junio 2, 2013