El Presidente de la Conferencia Episcopal de Venezuela (CEV), Mons. Diego Padrón Sánchez, explicó a ACI Prensa que su aporte a este Sínodo Extraordinario para la Familia fue "la necesidad de que la familia sea el lugar originario de la iniciación cristiana, que es una tarea fundamental de la familia".
"En América Latina tenemos familias cristianas, pero el problema está en que falta mucha formación, aunque haya religiosidad. Sin formación, no hay verdaderamente evangelización, necesitamos fortalecer el nivel evangelizador de las familias latinoamericanas", dijo.
Este problema presentado por Mons. Padrón queda recogido en la "Relatio post disceptationem", donde se señala que el desafío fundamental que encuentran las familias hoy es seguramente aquel educativo, que se convierte en más difícil y complejo por la realidad cultural de hoy.