Reese Witherspoon protagoniza película que transmite “un fuerte mensaje cristiano”

La actriz ganadora de un Oscar, Reese Witherspoon, quien protagoniza una nueva película sobre Los Niños Perdidos de Sudán, dijo a ACI Prensa que esta cinta destaca una serie de importantes mensajes cristianos y de la fe en Dios además de la perseverancia ante las dificultades.

La actriz afirmó que de los muchísimos guiones de Hollywood que ha recibido durante su carrera, "es raro que te den la oportunidad de hacer una película sobre algo que tiene un fuerte mensaje cristiano".

Basada en historias reales de refugiados sudaneses, "The Good Lie" (La buena mentira) se estrenó el 3 de octubre y relata la historia de un grupo de niños perdidos que viajan desde sus hogares devastados por la guerra al campo de refugiados de Kakuma en Kenia (decenas de miles de niños, principalmente cristianos que quedaron huérfanos por la guerra civil de Sudán entre 1983 y 2005, y muchos se vieron obligados a convertirse en niños soldados).

Después de vivir en el campo de refugiados durante más de una década, tres de los niños, ahora jóvenes, ganan una lotería y deciden emigrar a Estados Unidos donde son recibidos por Carrie (interpretada por Witherspoon), una trabajadora social que se encarga de ayudarlos a integrarse y encontrar puestos de trabajo en Kansas City, Misuri.

Los refugiados, Mamere, Jerimiah y Paul, son interpretados por los actores sudaneses Arnold Oceng, Ger Duany y Emmanuel Jal, un ex niño soldado. Witherspoon afirmó que trabajar con estos actores, algunos de los cuales también fueron refugiados, fue una experiencia inspiradora.

"Se podría pensar que alguien que ha vivido esa experiencia profundamente perturbadora en su niñez estaría devastada hasta el punto de no ser capaz de vivir", dijo la actriz. "Pero estos hombres han sido y son increíblemente espirituales, son increíblemente positivos. Ellos sencillamente brillan de gratitud por las oportunidades que se les han presentado".

Poco a poco, el personaje de Witherspoon se abre ante las luchas de estos jóvenes y se permite formar una relación con ellos. Al hacerlo, descubre una comunidad tanto para ella como para los refugiados.

La actriz dijo que la insensibilidad emocional de su personaje es algo con lo que muchas personas de la cultura de hoy podrían identificarse.

"Creo que en mi propia vida, y con mis hijos, el servicio en nuestras comunidades es el antídoto para el tipo de sociedad completamente absorbente en el que vivimos", señaló Witherspoon.

Aunque la película está clasificada para mayores de 13 años, por algunas escenas violentas y un lenguaje a veces fuerte, Witherspoon insistió en que es apropiada para muchos niños y que piensa verla con sus propios hijos de 10 y 15 años. "Una de las cosas más importantes que quiero que las personas sepan es que pueden llevar a sus hijos a ver esta película", dijo.

Actualmente, cerca de 700 mil personas siguen desplazadas debido a la guerra civil sudanesa y se espera que 50 mil niños mueran de hambre este año debido a las hambrunas que afectan la región.

Después de terminar el rodaje, Witherspoon y su hija, que para ese tiempo tenía 13 años, visitaron el campamento de refugiados de Kakuma para aprender más acerca de las condiciones de vida y conocer a algunas de las casi 250 mil personas que todavía viven allí.

Lo que más le conmovió fue ver a los niños durmiendo en las losas de concreto y ver que los niños iban a la escuela solo hasta los 11 años. "No hay razón para que continúen educándose porque no hay oportunidades de trabajo más allá de una cierta edad", lamentó Witherspoon. "Y todas estas personas inteligentes y líderes en sus propias comunidades, sólo son desplazados", agregó.

Además de realizar esta película para crear conciencia sobre la difícil situación actual de los niños perdidos de Sudán, los realizadores de The Good Lie también han creado el programa The Good Lie Fund para apoyar la educación de los que todavía viven en campos de refugiados.

Traducido por: Bárbara Bustamante