Mons. Demetrio Fernández, Obispo de Córdoba ha enviado su carta pastoral semanal, la primera después de una pausa de varios meses por las vacaciones de verano. En la nota el Obispo recuerda algunos de los acontecimientos más importantes que se han vivido estos últimos meses como "los ataques del llamado Estado Islámico a las poblaciones de Siria e Irak, produciendo millones de desplazamientos en campos de refugiados".
"Ha sido un verano de horror, que todavía no ha terminado. Necesitamos reaccionar con amor ante tanta violencia y ponernos manos a la obra para atender a tantos desplazados por la guerra", precisa el Obispo y por eso afirma que "Cáritas diocesana es un cauce adecuado".
Mons. Fernández también ha recordado al sacerdote de la orden de San Juan de Dios, el hermano Miguel Pajares que contrajo el virus del ébola en Liberia atendiendo a los enfermos y que a pesar de ser evacuado por las autoridades españolas murió por el virus el pasado 12 agosto.