Con una votación de 5-4, la Corte Suprema de Estados Unidos autorizó el ejercicio de la oración voluntaria en reuniones públicas.
"Comenzar encuentros públicos con una oración es un acto valioso de libertad que practicaron los mismos autores de la Constitución", explicó David Cortman, abogado senior de la Alianza en Defensa de la Libertad, el 5 de mayo.
La demanda contra las plegarias fue presentada en 2007 por la asociación Americans United for Separation of Church and State (que aboga por la separación Iglesia-Estado) representada por Susan Galloway y Linda Stephens. Ellos reclamaban que el pueblo de Greece, Nueva York, violó la constitución al comenzar un encuentro público con una oración.