El último domingo, la joven Katie Lentz sufrió un terrible accidente en una carretera de Missouri. Cuando los rescatistas perdían la esperanza de poder sacarla con vida de entre los fierros retorcidos de su automóvil, la joven pidió a todos "rezar en voz alta", entonces un sacerdote apareció para ayudarlos a orar y luego desapareció sin dejar rastro.
Los rescatistas aseguran que con sus oraciones, el sacerdote los ayudó a recuperar la fuerza que necesitaban para salvar a Katie y ahora junto a los familiares y amigos de la joven lo buscan para agradecerle.
El curioso episodio ha ocupado varias páginas de importantes medios de comunicación en Estados Unidos y algunos incluso cuestionan si se trató de una persona real o un ser celestial.