Las redes sociales evidencian el gran repudio ocasionó entre los chilenos la profanación de la Catedral de Santiago perpetrada por militantes abortistas la noche del 25 de julio. En pocas horas, se difundieron por Twitter y Facebook cientos de críticas a la violencia de los promotores del aborto.
El Subsecretario General de Gobierno de Chile, Mauricio Lob, denunció en su cuenta en Twitter que el ataque de abortistas a la Catedral de Santiago "es intolerancia pura".
"Queremos un Chile más tolerante, que respete las diferencias", dijo, para señalar a continuación que la ley anti-discriminación sanciona los ataques fundados contra una "religión o creencia".