31 de mayo de 2012 / 12:05 AM
Este 31 de mayo los católicos de todo el mundo celebran la fiesta de la Visitación de la de la Virgen María a su prima Isabel.
Según narran los evangelios, el ángel Gabriel le dijo a María que así como ella iba a ser la Madre de Jesús, su prima Isabel también estaba encinta de Juan el Bautista. La joven doncella de Nazaret estuvo ayudando a su pariente durante tres meses.
De este relato evangélico surgen dos importantes oraciones: la segunda parte del Avemaría y el canto del Magnificat, en el que la Virgen alaba a Dios por sus maravillas. Cuando Isabel oyó el saludo de María, "el niño saltó en su seno. Entonces Isabel, llena del Espíritu Santo, exclamó a grandes voces: ‘¡Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre! Pero ¿cómo es posible que la madre de mi Señor venga a visitarme? Porque en cuanto oí tu saludo, el niño saltó de alegría en mi seno’".