Al finalizar el rezo del ángelus de este domingo, el Papa Benedicto XVI expresó su solidaridad y apoyo a las víctimas de la violencia en Nigeria y a los afectados por las inundaciones en Génova, Italia.
Según informa la BBC, en los últimos días en el noroeste de Nigeria unas 100 personas han muerto en una serie de ataques de extremistas musulmanes del grupo Bolo Haram que han afectado a grupos cristianos.
Los ataques se han realizado contra estaciones de policía, edificios del gobierno e iglesias, entre otros.