La Asociación Derecho a Vivir (DAV) ha interpuesto este miércoles en los juzgados de Huelva una denuncia contra la consejera de Salud de la Junta de Andalucía, María Jesús Montero, y contra el hospital Blanca Paloma por un posible delito de omisión del deber de socorro y otro de inducción o asistencia al suicidio en el caso de Ramona Estévez.
Esta española de 90 años fue ingresada en el citado centro hospitalario y se le retiró la sonda nasogástrica que la alimentaba e hidrataba después de que la administración andaluza mediara la pasada semana ante el personal médico, tras sufrir el 26 de julio un infarto cerebral que "se había convertido en un proceso irreversible".
En declaraciones a los periodistas, el letrado de la asociación, Nicolás Morón, quien ante todo ha mostrado su solidaridad con Ramona Estévez y su familia, ha asegurado que la actuación de DAV corresponde a "dar cumplimiento a cuestiones jurídicas", ya que la retirada de la sonda, a su juicio, "no se corresponde con el ordenamiento jurídico".