El Prefecto Emérito de la Congregación para las Causas de los Santos en el Vaticano, Cardenal José Saraiva Martins, recordó en entrevista concedida a ACI Prensa que la Virgen de Fátima, a quien la Iglesia celebra hoy, fue quien salvó al Papa Juan Pablo II en el atentado que sufrió hace 30 años en la Plaza de San Pedro el 13 de mayo de 1981.
"Todos recordamos con gran dolor día el 13 de mayo de 1981, fue vivido con un gran sentimiento de dolor, pero también con un gran sentimiento de gratitud a la Virgen de Fátima que salvó la vida de Juan Pablo II, él estaba totalmente convencido de que si no murió aquel día fue gracias a la protección de la Virgen de Fátima", aseguró.
El Cardenal dijo también a ACI Prensa que el Beato Juan Pablo II solía decir "la Virgen de Fátima ha desviado la bala que debía herirme".