El Prefecto Emérito de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, Cardenal Jorge Medina, reflexionó sobre las repercusiones de un sonado caso de abuso sexual en el clero chileno y explicó que ni fieles ni sacerdotes están libres de las insidias del demonio.
"Un cristiano bien formado sabe que la fragilidad humana hace sus picardías. El demonio donde puede se mete. Los sacerdotes no están exentos de sus insidias. Hay una acción de Satanás por la falta de verdad", declaró en una entrevista concedida a la revista Caras.
Sobre el caso del sacerdote Fernando Karadima, el Cardenal Medina defendió la sanción impuesta por el Vaticano porque "en el derecho canónico existe una norma que invita al juez al no extremar la severidad, especialmente cuando se trata de una persona anciana o con reconocidos méritos".